Árbol mediano de corteza gris que llega hasta los 20 m de talla. Las hojas son caducas, compuestas de hojuelas en número impar (imparipinnadas), alargadas y serradas en todo su margen. Las flores son blancas y aromáticas, y nacen en mayo o junio. Los frutos son globosos, al madurar tienen el tamaño de un guisante, son de color rojo o anaranjado más o menos intenso.
El serbal de cazadores crece en hayedos, robledales, abedulares, abetales, pinares, piornales, o aislado en claros, márgenes y roquedos. Aparece en barrancadas, laderas frescas y húmedas de las zonas montañosas. Soporta bien las variaciones de temperatura, sequía y humedad, y el suelo pobre y pedregoso, Se puede ver hasta los 2.300 m de altitud y soporta bien el frío.
En la Península es más abundante en el norte y va desapareciendo hacia el sur.
Los frutos de esta especie contienen mucha vitamina C e incluso hay quien elabora con ellos mermeladas y licores. Actualmente este árbol se utiliza para fijar taludes y cauces, y como ornamental por la vistosidad de sus flores y frutos, que se mantienen largo tiempo sobre las ramas. Sus frutos servían como cebo para cazar aves (aucuparia deriva de aucupor, que significa ‘cazar aves’).
El serbal de cazadores crece en hayedos, robledales, abedulares, abetales, pinares, piornales, o aislado en claros, márgenes y roquedos. Aparece en barrancadas, laderas frescas y húmedas de las zonas montañosas. Soporta bien las variaciones de temperatura, sequía y humedad, y el suelo pobre y pedregoso, Se puede ver hasta los 2.300 m de altitud y soporta bien el frío.
En la Península es más abundante en el norte y va desapareciendo hacia el sur.
Los frutos de esta especie contienen mucha vitamina C e incluso hay quien elabora con ellos mermeladas y licores. Actualmente este árbol se utiliza para fijar taludes y cauces, y como ornamental por la vistosidad de sus flores y frutos, que se mantienen largo tiempo sobre las ramas. Sus frutos servían como cebo para cazar aves (aucuparia deriva de aucupor, que significa ‘cazar aves’).