FUENTE DEL CURA-HOYA DE SAN BLAS

FICHA TÉCNICA
TIPO: Circular
NIVEL: Bajo
DESNIVEL POSITIVO ACUMULADO: 436 m 
INICIO: Aparcamiento de Fuente del Cura (afueras de Miraflores de la Sierra)
FINAL: Aparcamiento de Fuente del Cura (afueras de Miraflores de la Sierra)
TIEMPO: 5-5.30 h
DISTANCIA: 18,3 km 
 
 
Hay varias rutas que llegan hasta la Hoya de San Blas, esta es una de ellas. Parte desde el parking de Fuente del Cura, a las afueras de Miraflores de la Sierra, donde se puede dejar bien aparcado el coche y coger agua en la fuente. Empezamos con un pequeño tramo lineal de ligera subida, antes de llegar al lugar donde comienza la ruta circular. Es un tramo de asfalto que luego se convertirá en una pista de tierra. Esta primera parte transcurre entre robledales y zonas urbanizadas, además de alguna propiedad ganadera.
Llegamos a un punto en el que la ruta se bifurca. Se trata de una pequeña explanada con un mirador, a la izquierda, entre rocas, que cuenta con unas vistas estupendas. Este es justamente el punto donde empieza y termina el tramo circular de la ruta. Nosotros hemos optado por ir por el lado derecho, que asciende en dirección hacia la montaña y luego regresaremos por el camino que nos queda a la izquierda.
 
© Javier Serrano
A medida que ascendemos por la pista de tierra el paisaje de robledales va siendo sustituido por otro de pinares. Nos iremos cruzando con algunos caminos que son vías pecuarias.
 
© Javier Serrano 






© Javier Serrano
Llegamos finamente a la puerta del Hueco de San Blas. Aquí hay una bifurcación hacia la derecha que conduce por otra ruta hasta la Fuentona. 
 
© Javier Serrano
© Javier Serrano
Continuamos por el camino de la izquierda, en dirección hacia el arroyo Mediano. Desde aquí tenemos una bonita vista sobre la espectacular Hoya de San Blas.  

Hoya de San Blas © Javier Serrano
En esta hondonada u hoya el camino hace una U y comienza a descender, en medio de un bosque de pinos, en paralelo al arroyo Mediano, un afluente del río Manzanares. 

© Javier Serrano
© Javier Serrano
© Javier Serrano
De vez en cuando nos topamos con algún enebro.
 
© Javier Serrano
Algo más adelante, cruzaremos la puerta de entrada al parque protegido. Después la señalización de la ruta puede confundirnos, pues el recorrido coincide con el GR-10 y un PR, y las señales se van alternando. Durante un trecho caminamos en paralelo al embalse de los Palancares. Finalmente alcanzamos la pequeña ermita de San Blas, donde también hay un mirador entre unas rocas.  

Ermita de San Blas © Javier Serrano
Vista desde la ermita de San Blas © Javier Serrano
A partir de aquí la ruta asciende hasta el punto de bifurcación inicial, entre cercados, propiedades privadas y alguna explotación ganadera. Una vez alcanzado ese punto, ya solo resta tomar de nuevo el tramo del principio hasta el parking.